Conejo Cabeza de León: Cuidados y características

El conejo Cabeza de León es una raza pequeña de conejo cuya característica principal es la gran mata de pelo que se encuentra en su cabeza, lo que le da un aspecto similar a un león macho en diminuto.

Popular durante los años 80, hasta 2002 no se reconoció oficialmente esta raza de conejo tan vistosa y especial. Si te has enamorado del conejo toy Cabeza de León ¡sigue leyendo y descubre todos sus secretos!

Características del conejo Cabeza de León

Lo que más destaca de este tipo de conejo es, como hemos mencionado ya, la melena que le rodea la cabeza, lo que le distingue fácilmente de otras razas de conejos y le da un aspecto muy parecido al de un león.

Tanto su melena como su pelaje pueden ser de muchos colores pero, dependiendo de sus genes, encontramos dos clases de conejos Cabeza de León:

• De melena simple: Su melena es menos tupida y más corta, y va desapareciendo a medida que crece.
• De melena doble: Tienen una melena muy abultada y tupida que no desaparece a medida que crece.

Los conejos Cabeza de León, también denominados lionhead, se encuentran dentro de la clasificación de conejos enanos o toy, ya que su peso se encuentra entre 1,3 kilos y los 2 kilos, dependiendo del sexo del animal. 

Su esperanza de vida es como la del resto de razas de conejo, entre los 8 y los 10 años. Sus orejas son más bien grandes, así como sus ojos, y su cuerpo es compacto y corto. El hocico largo y ancho es más característico en machos que en hembras, su cola es recta, recubierta por una capa de pelo y su pecho es también ancho. 

Origen del conejo Cabeza de León

Aunque sus orígenes no están del todo claros, se dice que esta raza podría haber surgido en Bélgica, fruto del cruce de conejos fox suizos y netherland dwarf. Otras teorías afirman que esta raza de conejo proviene de otros ejemplares enanos.

A pesar de que esta raza surgió en Bélgica, se desarrolló principalmente en Reino Unido, donde terminó siendo conocida en 1998. En ese mismo país se oficializó la raza en 2002 y hasta 2014 no fue reconocida como raza en los Estados Unidos.

Tipos de conejo Cabeza de León

Esta raza de conejo admite muchos colores de pelaje, siempre y cuando estos sean reconocidos; es decir, acepta colores ya existentes, no colores nuevos. En esta raza también es obligatorio que el color del manto de pelo externo sea el mismo que el de la subcapa de pelo.

Aún así, no existen tipos de conejo de esta raza, siendo lo único que los diferencia el color del pelaje. Los patrones de color más predominantes en esta raza de conejo son el negro, el marrón, el blanco, el azul, el chinchilla, el siamés, el naranja, el sable y el bicolor y tricolor combinado con el blanco. 

Carácter y comportamiento del conejo Cabeza de León

El conejo Cabeza de León tiene un carácter muy amistoso, cariñoso y amigable, siendo perfecto para tener como mascota. Sociables, tranquilos e inteligentes, son capaces de aprender órdenes básicas y de obedecer a la llamada. 

Todas esas cualidades les hacen unas mascotas perfectas para la familia, pero hay que tener cuidado con los niños, ya que son conejos de tamaño muy pequeño, lo que los hace más delicados, y son además muy nerviosos y sensibles a ruidos fuertes.

Alimentación del conejo Cabeza de León

Al igual que el resto de conejos, la alimentación del conejo Cabeza de León se debe de basar, sobre todo, en heno fresco con el que pueda ayudarse a desgastar sus dientes, que crecen constantemente. 

Las frutas, verduras y hortalizas también deben de formar parte de la alimentación de este conejo, así como el pienso, y evitar a toda costa el azúcar, los hidratos de carbono y los lácteos.

Dependiendo de su edad y tamaño, se le deberá de dar unas cantidades determinadas de comida y de alimentar con determinadas comidas. 

Alimentación del conejo Cabeza de León bebé

La alimentación de un conejo bebé se basa, principalmente, en la leche materna hasta la tercera semana, cuando se le empezará a alimentar con heno.

Sobre la semana 5 se le aumentará la cantidad de heno y se le reducirá la de leche y, para la semana 8, empezará el destete, ya pudiéndole alimentar con frutas, verduras y hortalizas, además de su heno y algún pienso específico para esta etapa.

Alimentación del conejo Cabeza de León adulto

Los conejos cabeza de León se convierten en adultos a partir de los 3 meses de vida, cuando empiezan a alimentarse de comida más sólida.

El heno es el alimento principal de los conejos, y se debe equilibrar con la ingesta de verduras y hortalizas, además de alguna fruta, aunque de forma esporádica, ya que contiene mucho azúcar. 

El pienso en forma de pellets también forma parte de la alimentación de estos conejos, siempre en pequeños puñados, y evitando que lleven algún ingrediente de origen animal, ya que estos animales son herbívoros. 

Alimentación del conejo Cabeza de León senior

A partir de los 6 años es cuando se considera senior un conejo. Para estos ejemplares, lo mejor es seguir alimentándolos como en su etapa adulta, siempre y cuando mantengan su peso. 

Si se ha vuelto débil, es importante alimentarlo con más pellets para mantener su peso y si, por el contrario, se pasan de su peso, la alfalfa es ideal para ellos. Si tienes dudas, la mejor opción es consultarlo con un especialista para que te dé las mejores pautas para tu conejo senior.

Salud del conejo Cabeza de León

Los conejos son animales que no suelen mostrar su salud. Esto se debe a su naturaleza, para evitar que puedan ser presa fácil en el medio ambiente. 

Los problemas más frecuentes de estos animales son los relacionados con los dientes, pues es una zona del cuerpo que no deja de crecer a lo largo de su vida y que necesita de su mordida para ir desgastándolos. 

Cortarles las uñas cada cierto tiempo es también importante para cuidar de su salud, así como estar al día de sus vacunas. Si ves que tu conejo está algo diferente, decaído o no es tan cariñoso como solía ser, lo mejor es que acudas a un veterinario para saber si está pasando una mala temporada o es, de hecho, un problema más grave.

Cuidados del conejo Cabeza de León

Los conejos no son animales difíciles de cuidar, pero hay que estar atento a su salud y a sus necesidades, ya que es nuestra mascota y no se debe desatender. 

Estos animales, por norma general, necesitan realizar ejercicio diario para evitar la obesidad, por lo que necesitaría una jaula con algunos juguetes, y disponer de tiempo de recreo a diario fuera de ella. 

Los conejos son unos animales muy limpios, no siendo necesario bañarlos a no ser que estén muy sucios. Esta raza de conejos Cabeza de León es muy susceptible a las altas temperaturas por culpa de su pelaje, por lo que es necesario estar pendientes de ellos durante las altas temperaturas para evitar que no les de un golpe de calor.

Pelo

La característica más notable de este conejo es también uno de sus mayores problemas. Su melena necesita ser cepillada todos los días para evitar nudos, pero también para recoger pelos muertos y evitar que se los pueda tragar en forma de bola de pelo.

Estas bolas de pelo son un grave problema, ya que se pueden atragantar al expulsarlas y, si son demasiado grandes, pueden ahogarse con ellas. Por ello, es necesario que coman malta, es decir, una pasta de origen vegetal a base de cebada que se usa como complemento alimenticio para prevenir las bolas de pelo, favoreciendo el tránsito intestinal.

A los conejos no les suele gustar la pasta de malta, pero un truco para hacer que la ingieren es poner esta pasta en sus patitas para que, cuando se aseen, se la tengan que comer al lamerlas. 

De todas maneras, este producto no es un fármaco, así que si ves que tu conejo tiene un problema grave con las bolas de pelo, es aconsejable acudir a un veterinario para que le realice una inspección y sepa exactamente cómo tratarle.

Ya sabes todo lo necesario para cuidar un conejo Cabeza de León. Si te has enamorado de estos pequeños, te recomendamos que adoptes uno en vez de comprarlo,  así estarás salvando a dos animalitos: el que acabas de llevarte a casa y el que se puede beneficiar de su sitio en la protectora.

Pon un conejo Cabeza de León en tu vida, ¡verás cómo ruge!