Su gran tamaño y complexión fuerte exigen educar a un pastor alemán desde los primeros meses de vida. Con un buen entrenamiento puede llegar a convertirse en tu mejor amigo y compañero más leal. Las claves radican en estimular la sociabilización temprana y enseñarle las reglas básicas de comportamiento.
Entender el carácter del pastor alemán es esencial para educarlo
Quizá hayas notado que tu cachorro de pastor alemán se muestra desconfiado ante los extraños, un rasgo común de esta raza. Por eso debes estimular la socialización temprana y exponerlo a diferentes experiencias desde sus primeros meses de vida. Así tu mascota se acostumbrará a relacionarse con otras personas y animales.
Educar a un pastor alemán también te permitirá evitar problemas de comportamiento y posibles accidentes con otras personas o animales en el futuro. No olvides que el pastor alemán es un perro guardián, por lo que no dudará en protegerte a ti y a tu familia ante una posible amenaza.
El pastor alemán es muy inteligente, trabaja duro y disfruta aprendiendo. Es una raza fácil de entrenar, a la que le gusta sentirse útil y que le reconozcan su esfuerzo. Un estudio realizado en la Universidad de Edimburgo comprobó que su genética facilita las relaciones positivas con las personas y dejarse guiar por estas. El secreto para aprovechar esas cualidades consiste en comenzar la educación y entrenamiento del pastor alemán cuanto antes.
Las primeras lecciones
A partir de los 2 o 3 meses de edad, el cachorro de pastor alemán estará listo para aprender algunas lecciones sencillas. Puedes enseñarle modales básicos, como atender a su nombre, hacer sus necesidades en un área específica o entrenarle para que regule comportamientos como los mordiscos o su relación con perros y personas.
El entrenamiento diario permitirá a tu perro aprender órdenes sencillas como sentarse, quedarse quieto o seguirte. Los primeros meses de vida también son un buen momento para marcar las pautas con la comida y evitar que se torne agresivo con la misma. Para conseguirlo, acaríciale mientras come y a veces dale de comer de tu mano. Así controlarás su ansiedad.
Claves para educar a un pastor alemán
- Empieza por conceptos básicos de entrenamiento. Adiestrar a tu pastor alemán no es difícil, pero requiere algunas nociones básicas de entrenamiento. Puedes elaborar un plan que comience por órdenes sencillas y vayan complicándose gradualmente.
- Usa la comida y los juguetes como recompensa. Los juguetes y golosinas preferidas de tu mascota son una herramienta de enseñanza y refuerzo positivo. Los juguetes de goma y los peluches son perfectos para los cachorros. Los ejemplares adultos preferirán los huesos y las cuerdas.
- Programa entrenamientos diarios, pero cortos. Un buen plan educativo debe incluir varias sesiones de entrenamiento al día, las cuales pueden variar en intensidad y tiempo según la edad del pastor alemán y los objetivos del entrenamiento. Cada sesión no debe superar los 10 minutos, para evitar que tu mascota pierda la concentración.
- Apuesta por el refuerzo positivo. Las palabras positivas y las caricias funcionan mejor que los castigos. El perro pastor puede percibir la frustración a través de tu lenguaje corporal y tono de voz, lo que repercutirá negativamente en su educación. Por tanto, es mejor que suspendas el entrenamiento antes de perder la paciencia.
- Entrena también su mente. El entrenamiento mental es un pilar esencial en la educación del pastor alemán ya que estimula sus habilidades intelectuales. Apuesta por ejercicios como la búsqueda de objetos o el juego del escondite. Si quieres añadir una dosis de diversión, recurre a los juguetes rellenables.
Educar a un pastor alemán es mucho más sencillo de lo que imaginas. Solo necesitas ser paciente y perseverar en tu objetivo. Tu mascota se convertirárápidamente en un obediente compañero de aventuras.
