Cada verano parece más caluroso que el anterior, y no es solo una sensación: el cambio climático está haciendo que las olas de calor sean más intensas y duren más tiempo. Mientras buscamos la sombra, nos hidratamos o encendemos el ventilador, a veces se nos olvida que nuestros gatos también lo están pasando mal.
Con su manto de pelo y su manera discreta de mostrarse incómodos, pueden estar sufriendo sin que nos demos cuenta. Por eso, en este artículo vamos a resolver las dudas más comunes y darte los mejores consejos para saber cómo refrescar a un gato cuando llega el calor. ¡Sigue leyendo!
¿Por qué es importante refrescar a tu gato en verano?
Los gatos no sudan como los humanos. Sus glándulas sudoríparas se limitan a las almohadillas, la barbilla, los labios, las axilas y el área anal. Esto significa que su capacidad para regular la temperatura corporal es mucho más limitada.
Cuando la temperatura ambiente sube demasiado, corren el riesgo de sufrir un golpe de calor. Si quieres saber más sobre cómo detectarlo a tiempo y qué hacer, te recomendamos leer nuestro post sobre el golpe de calor en gatos.
Los gatos necesitan sombra, agua fresca y ciertas atenciones especiales para sobrellevar el verano sin complicaciones. Nuestro objetivo es asegurarnos de que se mantengan frescos, saludables y felices.
Qué hacer para refrescar a tu gato
Aquí tienes una guía completa para aliviar el calor a un gato en casa:
Agua fresca siempre disponible
Los gatos son exigentes con el agua. Coloca varios cuencos repartidos por toda la casa, preferiblemente en lugares tranquilos y alejados del comedero, ya que muchos prefieren no beber donde comen. Cámbialos con frecuencia para que el agua esté siempre limpia y fresca, y si es posible, añade un par de cubitos de hielo para mantenerla más fresquita.
| CONSEJO: Las fuentes para gatos son una excelente opción: el sonido del agua en movimiento los estimula a beber más, ayudan a mantener el agua oxigenada y, además, muchos modelos cuentan con filtros que la mantienen libre de impurezas. |
Comida húmeda para mantenerlo hidratado
Alternar el pienso con comida húmeda ayuda a mejorar la hidratación. Puedes incluso refrigerarla unos minutos antes de servirla (sin que esté helada).
Lugares frescos y sombreados
Durante el día es conveniente mantener las persianas a media altura o casi bajadas para que el calor tarde más en entrar. Además, podemos aprovechar las noches, en las que suele refrescar, para ventilar la casa.
Recuerda colocar redes o mosquiteras en las ventanas para evitar que tu gato pueda caerse; por muy acostumbrado que esté nunca sabes cuándo puede asustarse o ver algo que llame demasiado su atención. Te recomendamos que eches un ojo a nuestro artículo sobre cómo proteger ventanas, balcones y terrazas para la seguridad de tus gatos.
Si tu gato tiene acceso al exterior es conveniente evitar las salidas en las horas de más calor. Además, deberá contar con una zona de sombra donde poder descansar.
Utiliza camas o mantas refrescantes
Uno de los recursos más prácticos y seguros son las mantas refrigerantes para gatos. Estas mantas especiales contienen un gel que se activa con el peso del animal, proporcionando una sensación de frescor sin necesidad de electricidad ni congelación previa.
Son portátiles, seguras y muy efectivas para los días de más calor. Puedes colocarlas en su cama habitual, en el sofá o en cualquier rincón donde le guste descansar. Aquí te dejamos unas recomendaciones para elegir la mejor manta refrescante para tu gato.
Ventiladores y aire acondicionado
Podemos usar un ventilador o el aire acondicionado para mantener la temperatura de casa más fresca. Es preferible utilizar ambos bajo nuestra supervisión. Todos conocemos el carácter curioso de los gatos; puede darles por atacar el ventilador o el cable del mismo, y terminar haciéndose daño. Al encender el aire acondicionado, debemos tener cuidado de que la temperatura no baje excesivamente, ya que los contrastes también son perjudiciales.
Evitar el ejercicio durante las horas de calor
Es preferible que tu gato reserve las horas de más actividad a la mañana o la noche, cuando la temperatura haya bajado. Podemos aprovechar por la noche y un rato por la mañana para jugar con él para evitar que durante el mediodía esté muy activo.
No dejes a tu gato encerrado en sitios pequeños y mal ventilados
Nunca debemos dejar a nuestro gato encerrado en el vehículo, transportín o en una habitación pequeña. En estos lugares las temperaturas suben rápidamente sin posibilidad de que él busque un lugar fresco donde refugiarse.
Cepilla a tu gato
Nosotros podemos ponernos o quitarnos ropa para aguantar las altas o las bajas temperaturas, pero nuestros gatos cuentan con su pelaje todo el año. Durante la época de muda lo que hacen es adaptar ese pelaje a la época del año, algo en lo que podemos echarles una mano a través del cepillado.
Lo ideal es acostumbrar a nuestro gato al cepillado desde pequeño, para que no suponga una batalla campal. En el mercado hay cepillos para gatos que nos ayudan a eliminar el pelo suelto de nuestros felinos facilitándoles la muda y ayudándoles a soportar las altas temperaturas.
Utilizar una botella con agua congelada
Para proporcionar a nuestro gato una zona de descanso fresca, podemos llenar una botella de plástico hasta la mitad y colocarla en el congelador. Una vez que el agua se haya congelado, envolvemos la botella con una toalla y la colocamos en el lateral de una de las camas de nuestro gato. De esta forma, ante un calor excesivo, se podrá refugiar en ese rinconcito.
Humedecer las zonas de refrigeración de nuestro minino
Como ya hemos comentado, nuestro gato solo cuenta con zonas concretas de su cuerpo para refrigerarse. Para ayudarle a refrescarse, podemos pasar una toalla humedecida en esas zonas (axilas, almohadillas, barbilla, tripita).
Esperamos que con estos consejos paséis un verano ¡genial! Mira nuestra catálogo especial verano:
¿A los gatos les gusta el calor?
En general, los gatos tienen predilección por lugares cálidos. Los vemos buscar rincones soleados, radiadores, ordenadores portátiles y cualquier fuente de calor que les proporcione confort. Esto tiene sentido, ya que su pelaje está diseñado principalmente para conservar el calor y protegerlos del frío.
Sin embargo, esa tolerancia tiene un límite. Si la temperatura sube demasiado, lo que antes era agradable se vuelve insoportable. Un gato que normalmente busca calor puede comenzar a evitarlo, lo cual es una señal clara de que algo no va bien.
¿Los gatos se estresan con el calor?
Sí, y mucho. El calor excesivo puede afectar el estado anímico de tu gato. Algunos signos de estrés por calor en los gatos incluyen:
- Respiración rápida y superficial.
- Lengua colgando.
- Salivación anormal.
- Temblores musculares.
- Búsqueda desesperada de sombra o superficies frías.
Cuando esto ocurre, no solo debemos refrescar al gato, sino también ofrecerle un ambiente tranquilo para que se recupere sin agobios
¿Cómo saber si mi gato tiene calor?
Saber si tu gato tiene calor es importante para actuar a tiempo. Algunas pistas que te pueden indicar que el calor le está afectando son:
Señales físicas:
- Nariz caliente y seca.
- Almohadillas sudadas.
- Lengua fuera de la boca.
- Ojos semicerrados o mirada perdida.
Cambios de comportamiento:
- Busca lugares más frescos.
- Se mueve menos o se estira mucho para disipar calor.
- Evita el contacto físico o los juegos.
- Deja de comer o muestra poco interés en el agua.
¿A qué temperatura tiene calor un gato?
La temperatura corporal de un gato se mantiene normalmente entre 38 ºC y 39,5 ºC. Aunque pueden sentirse cómodos en ambientes cálidos, lo ideal es que la temperatura ambiente no supere los 30 ºC. A partir de los 30 ºC, muchos gatos pueden empezar a sentirse incómodos, especialmente si no tienen acceso a zonas frescas, ventiladas y sombreadas.
El golpe de calor puede aparecer si la temperatura corporal del gato supera los 40,5 ºC. En esos casos, es urgente actuar para evitar consecuencias graves.
¿Es bueno mojar a un gato en verano?
La mayoría de los gatos no son amantes del agua, por lo que mojarlos puede ser una experiencia estresante. Aun así, si el calor es extremo, se puede recurrir a:
- Pasar una toalla húmeda por las zonas clave (axilas, ingles, barriga, almohadillas).
- Usar un pulverizador con agua a temperatura ambiente y rociar ligeramente (solo si el gato lo tolera).
- Dejarles elegir si quieren acercarse a una fuente o lavabo con algo de agua.
El verano puede ser una época maravillosa también para los gatos, siempre que tomemos las precauciones necesarias. Con estos consejos sabrás exactamente qué hacer para refrescar a tu gato, cómo saber si tiene calor y cómo aliviar el calor a un gato en casa de forma segura.
¡Haz del verano una estación feliz también para tu felino! 💗😻
Y si tienes planeado un viaje veraniego no te puedes perder los siguientes artículos:
En Tiendanimal queremos ayudarte a proteger a tu mascota. Si tienes cualquier duda, nuestros especialistas estarán encantados de asesorarte en el teléfono de Atención al Cliente que puedes consultar aquí o en cualquiera de nuestras tiendas.
Haz tu pedido en tiendanimal.es, la tienda online especializada en productos para mascotas número uno en España, o si lo prefieres, acércate a tu tienda más cercana o llámanos por teléfono y te lo enviamos a casa. Recuerda que tienes disponible el servicio de Click & Collect para comprar online y recoger el pedido en tu tienda favorita ¡y con regalo! ¡Corre y no te pierdas nuestras ofertas!
