El período de celo en las perras siempre resulta en la formación de varios óvulos con sus correspondientes cuerpos lúteos. Estos elementos que se forman en los ovarios son los responsables de producir progesterona, la hormona necesaria para mantener un embarazo normal. Ya sea que la perra quede o no preñada, igual se genera progesterona en grandes cantidades. Lo normal es que los cuerpos lúteos se vayan desgastando y la progesterona vaya disminuyendo hasta desaparecer y el útero y ovarios se preparen para un nuevo ciclo.
En las perras que sufren pseudo-preñez los niveles de progesterona no disminuyeny, cumplidos los dos meses después del celo, comienza a formarse prolactina, las mamas se ingurgitan y se cargan de leche preparándose para un parto que no ocurrirá. Es importante recalcar que la falsa preñez no tiene ninguna relación con un deseo de ser madre, como muchas personas creen. Es simplemente un desequilibrio hormonal que no implica ni frustración ni depresión por parte de la perra.
Los signos clínicos más frecuentes son:
- Fabricación de un nido: la perra puede cavar hoyos, esconderse bajo las camas o llevar material blando a un rincón.
- Adopción de objetos inanimados: muchas perras adoptan un muñeco o un trozo de tela y lo cuidan como si fueran sus hijos. Incluso se las ve nerviosas y hasta agresivas, según sea su personalidad.
- Agrandamiento de las mamas: las glándulas mamarias se cargan realmente con leche, y si se las presiona suavemente se pueden extraer unas gotas. A veces llegan a estar doloridas y sufrir mastitis.
Estos síntomas se presentan entre 2 y 3 meses después del celo y por lo general desaparecen solos sin necesidad de tratamiento al cabo de 2 a 3 semanas. Es importante tocar lo menos posible las mamas, ya sea con compresas calientes o masajes, pues esto actúa como estímulo para la producción de más leche. Si la perra se lame excesivamente habrá que usar un collar isabelino para evitar que se lastime.
Existen preparados homeopáticos que se pueden administrar en este período, sobre todo para las perras que se estresan demasiado o se muestran deprimidas o dejan de comer. También se recomienda darlos desde que termina el celo en las perras con antecedentes de pseudo-preñez.
En los casos más severos o que no remiten en el tiempo esperado se pueden utilizar tratamientos con hormonas. La hormona de elección es la cabergolina o la bromocriptina, que son antagonistas de la prolactina (la hormona responsable de la formación de leche). Se administran aproximadamente por una semana, hasta que cesa la acumulación de leche en las mamas.
Las perras que sufren de estos embarazos psicológicos tienden a repetirlos celo tras celo. Si bien esta no es una patología seria, sí causa malestar tanto a la perra como a sus dueños. Además se cree que el agrandamiento repetido de las mamas puede predisponer a la aparición de tumores, por lo que se recomienda la esterilización como medida de control a largo plazo.

Ayudante Técnico Veterinario especializada en etología canina. Tiendanimal me ha permitido durante años trabajar en lo que más me apasiona: el mundo animal. Compagino mi trabajo colaborando como voluntaria en protectoras, santuarios, reservas y cualquier evento o actividad relacionada. He realizado diversos seminarios y cursos relacionados con la educación canina, las aves, la primatología y un largo etcétera. Disfruto aprendiendo cada día de estos increíbles compañeros con los que tenemos la suerte de convivir.