Las bombas de aire son artefactos sencillos y económicos que cumplen la función de aportar oxigeno al agua del acuario. Lo que hacen es soltar burbujas en el fondo de la pecera, ya sea mediante una piedra difusora, instalándolas debajo del sustrato o usando elementos decorativos fabulosos como volcanes, géiseres, cofres, etc. Estas burbujas difunden oxigeno en el agua, cuanto más pequeñas y numerosas son, más efectivas resultan. Además al llegar a la superficie provocan una leve agitación que favorece el intercambio gaseoso entre el agua y el aire.
Los peces obviamente necesitan oxígeno para respirar y las plantas lo consumen durante la noche, pero también hay otros procesos bajo el agua que consumen el oxígeno disuelto. Las bacterias utilizan oxígeno para transformar los restos nitrogenados en sustancias menos tóxicas, de modo que cualquier elemento en descomposición, ya sea alimento, materia fecal, hojas muertas o desprendidas, provoca un mayor consumo de oxígeno en el acuario. Es cierto que las plantas también producen oxígeno mediante la fotosíntesis, pero esto ocurre solo durante las horas del día en que tienen luz apropiada. No es fácil lograr una población de plantas suficiente para abastecer a todos los seres vivos del acuario, considerando que además nuestras peceras suelen estar superpobladas y que se les da demasiado alimento a los peces.
Hay que considerar también que hay características propias del agua que modifican su capacidad de retener oxígeno. A medida que el agua aumenta la temperatura, el oxígeno disuelto disminuye. Por otro lado, el agua salada también tiene menos oxígeno disuelto.
A no ser que tengas una manera de medir el oxígeno disuelto en el agua de tu acuario y veas que no es necesario, te recomendamos instalar un aireador acorde al tamaño de la pecera. Si es muy alargada puede ser mejor poner dos pequeños enfrentados en vez de uno grande. Una pecera profunda requiere una bomba de aire más fuerte para vencer la presión generada por el agua. También necesitarás un aireador potente para los adornos que se mueven con el paso de las burbujas. En definitiva, un aireador es un elemento económico, no consume demasiada electricidad ni ocupa mucho espacio y puede ser un factor importante para el bienestar y la salud de tus peces.
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