Bella es la gigante de corazón más dulce que puedas imaginar. Hay un dicho que dice que cuanto más grande es un perro, más grande es su bondad. Y Bella es la prueba viviente de ello. Esta mastina imponente y preciosa fue encontrada vagando por las calles de un pueblo de Jaén, muerta de hambre, agotada y sin rumbo. Su cuerpo grande y esquelético apenas sostenía la esperanza de encontrar ayuda. Sabíamos que, si no actuábamos rápido, su destino sería el peor: en cuanto alguien ve un perro grande en la calle, llaman a la perrera… y allí no hay segundas oportunidades. Mucho menos para los que, como ella, ocupan más espacio en la jaula, pero también en el alma. Por suerte, Salvando Ángeles de las Calles decidió hacer justo eso: salvarla. Desde entonces, Bella vive en una residencia donde por fin ha empezado a conocer lo que es el respeto, la atención y el cariño. Y no puede ser más maravillosa. Alegre, dulce, leal, sociable, cariñosa… Bella lo tiene todo. Es una perra que, a pesar de todo lo vivido, solo sabe regalar ternura. Se lleva fenomenal con otros perros, le encanta la gente, y su enorme corazón está listo para entregarse por completo a quien quiera abrirle su hogar. ¿Tienes sitio en tu vida para una gigante noble y buena? Bella solo necesita una oportunidad para demostrarte lo especial que es. Y te prometemos que, si se la das, no te arrepentirás jamás.