Jugar con tu perro

Jugar con tu perro enriquece y mejora la calidad de su vida. Satisfaciendo su necesidad de formar parte de un grupo social, su manada, y proporcionarle el estimulo físico y mental tan necesario para su correcto desarrollo.

Los juegos activos previenen del aburrimiento

Existen patologías del comportamiento debido a este aburrimiento, como dedicarse a mordisquear sus pies, patas, rabo o la alfombra u otros objetos de la casa cuando esta solo. Algunos incluso ladran al irse su dueño lo que puede resultar muy molesto para los vecinos y traernos graves problemas.

Un animal que no juega puede aletargarse o volverse muy excitable cuando regresas a casa o recibes visitas. Si juegas con tu mascota desde pequeño mantendrá su mente ágil y su cuerpo en buena forma física.

Fomentar el juego desde cachorros

Jugar con tu perro desde cachorro le ayuda aprender a convertirse en adultos, a cazar, a perseguir, a agarrar y mantener así sus habilidades naturales y su instinto de supervivencia.

El cerebro del perro se desarrollara hasta 12 semanas después de su nacimiento y los juegos son un estimulo necesario para este crecimiento. Debe empezarse por los juegos mas sencillos para que aprenda rápido y así se sienta recompensado; este premio puede ser un poco de comida, una galleta, muchos elogios o simplemente darle la pelota que tanto quiere.


Utiliza pelotas, pelotas con cuerdas o huesos de cuero especialmente diseñados para tu mascota que pueden comerse sin que supongan un riesgo para su salud. Utiliza también juguetes blandos, o pelotas con orificios para rellenar con pienso o golosinas, estas le atraerán por su olor y le dará la satisfacción de cazar su propio alimento. Al cogerlo disfrutará lamiendo hasta el ultimo trocito y es un buen entretenimiento para los perros de todas las edades.


Cuando un perro es adulto puedes enseñarle a saltar por encima de vallas, troncos u otros obstáculos, pero asegúrate de que no existe peligro en el salto.

Cómo practicar ejercicio o jugar con tu perro anciano

La natación es otro magnifico ejercicio especialmente para perros mayores ya que el agua amortigua los dolores de sus extremidades y les reconforta.

Existen razas que disfrutan especialmente del agua como los Labradores, Golden Retrievers, Cockers, Springers Spaniel o el Perro de Agua Andaluz. Sin embargo no debemos olvidar que todas las razas existentes comparten el mismo origen de forma que oler, rastrear y atrapar les gustara a todas.

Para perros en la tercera edad la estimulación mental y hacer diariamente un ejercicio suave y participar en algún juego mejorará su calidad de vida. Aquí los juegos deben ser cortos y pocos fatigosos.

Existen estudios que demuestran que aquellos que disfrutan de una buena alimentación, del ejercicio adecuado a su edad, tamaño y condición física, sufren menos deterioro físico y mental. Garantizamos así su longevidad, una buena razón para jugar con ellos.

¡Así que a jugar y divertirse, os sentará muy bien a los dos!


Ayudante Técnico Veterinario especializada en etología canina. Tiendanimal me ha permitido durante años trabajar en lo que más me apasiona: el mundo animal. Compagino mi trabajo colaborando como voluntaria en protectoras, santuarios, reservas y cualquier evento o actividad relacionada. He realizado diversos seminarios y cursos relacionados con la educación canina, las aves, la primatología y un largo etcétera. Disfruto aprendiendo cada día de estos increíbles compañeros con los que tenemos la suerte de convivir.

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3 comentarios en «Jugar con tu perro»

  1. BUENOS DÍAS:

    MI PERRA ES CRUCE DE PASTOR ALEMÁN Y LABRADOR. ES MUY BUENA, PERO LADRA MUCHO A LOS EXTRAÑOS Y NO DEJA QUE LA TOQUEN.

    CÓMO PUEDO HACER QUE CONFÍE MÁS

    SALUDOS

    Responder
    • Hola Josefa, tienes que llevarla mucho a sitios públicos, primero donde vea pocas personas para que gane confianza. Lleva golosinas o juguetes que le gusten para distraerla y lograr que asocie las personas con algo que le gusta. Cuando veas que alguien se aproxima, le llamas la atención y la acaricias. La idea es darle algo más interesante que hacer y que vaya desviando su atención. No dejes que se le acerquen hasta que ella se sienta más segura. Puedes darle flores de Bach mientras haces el adiestramiento. Ten mucha paciencia y lograrás que se acostumbre a disfrutar del paseo.

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